jueves, 7 de enero de 2010

Hemos roto.

Photobucket
Querido amigo:
Era todo tan sencillo, tan fácil y tan natural a tu lado, que en ese momento, con el calor de tus labios aún reciente en los míos, supe que no podía durar.
Nunca tuve la suerte suficiente para que nada bueno me ocurriese. Me equivoqué no una, mil veces. Nada tenía sentido, nada era fácil. Pronto, las sonrisas fingidas se convirtieron en mis mejores sonrisas, porque las verdaderas se declararon extinguidas.
No había nada bueno en mí. Débil, frágil, me había caído tantas veces que las fracturas eran ya irreparables, ¿y quién pide una muñeca rota por Navidad?
Te confundiste conmigo, Romeo, elegiste a la Julieta equivocada. Te enamoraste de una fachada, un aspecto de niña feliz irreal y falso, y te viste atrapado en una red de sentimientos doloridos y palabras muertas que te arrastró hacia el abismo.
Yo no soy una chica sencilla y alegre, como tú. Soy depresiva, gris, aburrida, sentimental, autocompasiva, arisca, impaciente, triste, amarga, sin gracia, inútil, torpe, monótona, innecesaria… Yo sólo puedo ofrecerte un mundo sin color y con tendencias autodestructivas, no tengo nada adecuado para ti.
Pero no te das cuenta, ¿por qué? Y yo no tengo la fuerza suficiente para abrirte los ojos, no por temor a que me dejes, sino porque me es muy difícil luchar contra mí misma, contra mi egoísmo. Porque yo te quiero aquí, eso ya lo sabes. Eres como un bálsamo para mis heridas, haces que mi corazón deje de sangrar. Pero, aunque ya palpita, no cicatriza. Está roto, para siempre, ¿por qué no lo ves? No vas a conseguir cambiarme, desiste, es inútil. Vete, date por vencido como hicieron tantos otros.
Ay, Romeo, te equivocaste de Julieta. Yo no puedo hacerte feliz, no valgo para eso. Por ello, y porque mi infelicidad es tan grande como contagiosa, supe que lo nuestro no podía durar.
Y es una lástima, porque me gusta estar contigo, pero sabes que soy una bomba de relojería a punto de estallar, y mi onda expansiva nos despedazará a ambos si te quedas aquí. Es mi destino, no el tuyo, y no quiero arrastrarte conmigo.
Márchate, aléjate ahora que puedes, antes de que tu mundo se vuelva tan gris y triste como el mío. Es tu última oportunidad, la última, ¿lo oyes? La cuenta atrás a comenzado;
Romeo, huye antes de que Julieta explote.

Atentamente,
Xidre.

2 comentarios:

Marcodefotos dijo...

mmm... es guay! ;D
pero triste... mmm... quiero alguno alegre eh? ;)

Xidre dijo...

jaja, gracias Marcos =)
triste, triste, siempre triste, no puedo evitarlo u.u
alegre va a ser dificil, pero si puedo hacer algo diferente, xD
gracias de nuevo, Marcos, por seguir por aqui ;)